Ayer fui a ver la obra de teatro «Perduts» en el Aquitània Teatre interpretada por Xavier Bertan y Jordi Coromina bajo la dirección de Ramon Madaula.
Ambos actores, excelentes los dos, interpretan a dos operarios de una fábrica que suelen quedar en un restaurante para comer. Durante sus encuentros hablan sobre sus vidas rutinarias hasta que en un momento las conversaciones inician un rumbo sin marcha atrás posible.
La obra de teatro es una comedia ágil, de una puesta en escena sencilla, pero con una enorme capacidad dialéctica de llevar al espectador a imaginarse y palpar las escenas como si ocurrieran detrás de cada palabra. Xavier o Jordi, o lo que es lo mismo, Joan y Lluís, logran una complicidad con el público desde los primeros instantes. Sus quejas, son las nuestras, sus rutinas, también, el desenlace ya depende de cada uno de nosotros.
Como bien dice Josep Sandoval en su blog (www.bollerifafina.com)
Son personajes difíciles por la aparente facilidad de hacerlos cercanos y permitir que entremos en sus mundos de uniforme y banalidades hasta hacerlas atractivas para el espectador.
En definitiva, pasé un buen rato y me divertí muchísimo, os recomiendo esta obra.